Washington, 9 oct (PL) El presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó hoy que su embajadora ante la ONU, Nikki Haley, dejará el cargo a finales de año, lo cual supone la salida de quien ejecutó sus polémicas decisiones sobre el organismo multilateral.
Hicieron un gran trabajo, aseguran ambos
«Nikki Haley ha sido muy especial, ha hecho un trabajo fantástico», expresó el mandatario republicano en la Casa Blanca junto a la diplomática, poco después de que reportes de prensa informaron sobre la renuncia de la mujer que llegó a puesto en enero de 2017.
De acuerdo con el gobernante, juntos hicieron una gran labor y resolvieron muchos problemas, entre los cuales mencionó las tensiones con la República Popular Democrática de Corea.
A su vez, la embajadora manifestó que Estados Unidos ahora «es fuerte otra vez», en referencia a un grupo de controvertidas decisiones anunciadas por ella y por Trump con relación a Naciones Unidas y que despertaron rechazo entre la comunidad internacional.
En ese sentido, mencionó que recortaron 1,3 mil millones de dólares del presupuesto de la ONU, lo cual, según ella, hace a la organización «más fuerte y eficiente», y se refirió también a la imposición de tres paquetes de sanciones contra Corea del Norte.
También resaltó como algo positivo que Trump abandonara el acuerdo nuclear alcanzado entre Irán y seis potencias mundiales en 2015, una medida adoptada por el jefe de la Casa Blanca pese a que el resto de los participantes en el mecanismo han defendido ese pacto.
Según Haley, en su etapa en la ONU también vio la «parcialización» contra Israel, lo cual llevó al mandatario a la criticada decisión de mover la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén «y le demostró al mundo que vamos a colocar nuestra embajada donde queramos hacerlo».
Todas esas cosas han hecho una gran diferencia, manifestó la funcionaria, quien consideró que su nación «ahora es respetada».
Agregó que a otros países quizás no les gusta lo que Washington ha hecho, «pero nos respetan, saben que si decimos que haremos algo, lo hacemos».
Haley, exgobernadora de Carolina del Sur, no dio motivos para su dimisión, y descartó que tenga presentado postularse para las elecciones presidenciales de 2020, pues dijo que en esos comicios respaldará al actual gobernante.
El portal digital Axios sostuvo que ella discutió su renuncia con Trump la semana pasada durante una visita a la Casa Blanca, y que la noticia conmocionó a una serie de altos funcionarios del gobierno.
Su etapa como embajadora ha estado marcada por meses de una relación compleja con Naciones Unidas, ya que solo en el último año el presidente estadounidense decidió abandonar la Unesco, el Pacto Mundial sobre Inmigración y el Consejo de Derechos Humanos.
Con su renuncia, Haley se convierte en la última figura de política exterior de alto perfil en abandonar la administración Trump, pues ya lo hicieron antes el exsecretario de Estado Rex Tillerson, y dos asesores de seguridad nacional, Michael Flynn y Herbert McMaster.